Al poco de llegar a mi último destino, y tras comprobar que mi bagaje de experiencia en otras instituciones tenía una aplicación limitada, colgué de la pared de mi despacho un folio con una frase que tomé de unos apuntes de un curso sobre dirección que encontré rodando por casa: "si siempre haces lo que siempre has hecho, siempre obtendrás lo que siempre has obtenido: más de lo mismo". No he conseguido saber quién dijo esto (parece que es una frase anónima). Para mí ha sido un recordatorio permanente de la necesidad de cambiar. El folio sigue ahí, pegado a la pared amarilleando día tras día. Pero no me atrevo, no ya a quitarlo, sino ni tan siquiera a renovarlo.
Hace un par de días leí en Marca un artículo que comentaba cosas sobre Guardiola, el entrenador del Barça, e incluía, entre otras, una frase pronunciada por el gran Pep: "no hay nada más peligroso que no arriesgarse"....
Cambiar, arriesgarse... OK, pero ¿cuándo?, ¿cómo? La respuesta en otra frase, en este caso de Tomás Moro: "Dios, ayúdame a tener fuerza para cambiar las cosas que puedo cambiar, para soportar las cosas que no puedo cambiar, pero, sobre todo, dame inteligencia para comprender la diferencia".
Foto: Pushing against the wall 3, por monderniermot, http://www.flickr.com/photos/28256286@N06/3349823018
1 comentario:
Gracias por hacerme pensar…
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